Tradicionalmente esta tarea era asumida por el propietario
del terreno por el que pasaba el río y en zonas comunes la limpieza corría a
cargo del ayuntamiento.
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| Foto: Teresa Diez |
Esta limpieza era tan necesaria en invierno para evitar
desbordes como en verano para conseguir que las aguas mermadas por el sol no
quedasen embalsadas por presas espontáneas a base de ramas, troncos, hojas y
basura (cada vez menos común en nuestros campos).
La tarea había caído en desuso durante décadas debido, en
parte, a que no se hecha en falta si no hay demasiado caudal en los ríos. Y a
las gomas que utilizan los propietarios de huertos y parcelas para regar.
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| Foto: Teresa Diez |
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| Foto Teresa Diez |
Pero estos dos últimos años
están siendo muy lluviosos lo que propicia el crecimiento de ríos y
riachuelos que, si no están limpios, corren el riesgo de desbordarse.
En Berzocana han estado limpiando algunos riachuelos y la verdad es que la diferencia es notoria. Incluso hay determinadas zonas que están irreconocibles. Como el río de la Camichería que viene desde la sierra y pasa por la Fuente Nueva o el riachuelo que sale de la Fuente de las Carretas.
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| Foto Teresa Diez |
Por último, para los que nos leéis desde lejos con estas fotos os queremos llevar un
pedacito de la belleza natural que estos días de lluvias y sol se hace patente
en Berzocana
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| Foto Teresa Diez |
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| Foto Teresa Diez |
Realizado por: María Teresa Diez Serrano
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